Beneficios del Yoga en nuestro cuerpo físico

En el anterior post te contábamos todos los beneficios que tiene el Yoga, si quieres volverlo a leer o te lo has perdido te dejo el enlace aquí. Hoy quiero contarte qué ocurre en tu cuerpo físico cuando realizas una asana.

Vamos a empezar por el principio, definamos qué es una asana: es el movimiento del cuerpo para llegar a una postura que forma un todo en sí mismo, por lo que repercute positivamente en todos los sistemas del organismo físico, emocional, mental y energético.
Imagen The Key Muscles of Hatha Yoga
Cuando adoptas una asana se ponen en acción, en primer lugar, el aparato locomotor, músculos, tendones, huesos y articulaciones se preparan.

Los órganos reciben un suave masaje, dependiendo de la postura se comprimen, se estiran, se calientan o se enfrían y aumenta la circulación sanguínea, consiguiendo un estado de salud en los órganos.


Trabajas con el sistema nervioso y plexos nerviososconseguirás, además del consabido estado de relajación, equilibrarlo y también un efecto vitalizante.


La circulación sanguínea se modifica durante el movimientodel  cuerpo, se dirige hacia una parte específica del cuerpo para luego retornar a todo el cuerpo, lo que produce una revitalización.

La respiración al ser profunda llega hasta todos los órganos y músculos de nuestro cuerpo disminuye así la fatiga muscular y hace que el cuerpo se acomode en la postura para obtener todo el beneficio de la asana.

Y, por último, el sistema energético, a través de la respiración tomamos el prana, la energía sutil, y mediante las asanas hacemos que el prana circule y llegue a todo el cuerpo.

Hay muchas maneras de clasificar a las asanas, yo lo voy a hacer por el movimiento de la columna: flexión, extensión, torsión, invertidas y de pie:
  • Flexiones de columna:En las flexiones de tronco toda la zona abdominal es masajeada, los órganos quedan presionados por la flexión previniendo trastornos del sistema digestivo, como la gastritis, el estreñimiento… Se desbloquea el sistema nervioso autónomo, se regula  la tensión arterial dado que el corazón no ha de bombear sangre en contra de la gravedad y la sangre circula con facilidad por todo el cuerpo.  Las glándulas suprarrenales  funcionan mejor. Todos los músculos y ligamentos  paravertebrales aumentan su elasticidad y la dotan de fortaleza corrigiendo desviaciones de la columna. Ejemplo de asana: Uttanasana.
  • Imagen Anatomía del Yoga de Leslie Kaminoff 
    Extensiones de columna: Aquí estamos justo expandiendo toda la zona anterior del cuerpo y sus órganos, como el hígado, el bazo…, al estirarse completamente consiguen un mejor funcionamiento. La zona posterior recibe un profundo masaje en  todos sus órganos, mejora el funcionamiento renal y las glándulas suprarrenales. Se expande la caja torácica, se activan los músculos respiratorios y previene de afecciones respiratorias tales como el asma. Los músculos anteriores, pectorales, abdominales se fortalecen. Estas asanas estimulan al sistema nervioso central incrementando su capacidad de soportar el estrés, por lo que nos llenan de vitalidad y energía. Ejemplo de asana: Ustrasana.
  • Torsión de columna: En las torsiones las vértebras  rotan lo que produce un estiramiento y fortalecimiento de los músculos y ligamentos que en ella se insertan, lo que previene y reduce las desviaciones del raquis tales como la escoliosis, la cifosis o lordosis. Se liberan las vértebras lumbares y con ellas los pinzamientos que en esta zona provocan la ciática. Los órganos pélvicos se comprimen, previniendo dolencias en la próstata y reduciendo las molestias de la menstruación.  Al masajearse los órganos abdominales se previenen problemas en el sistema digestivo como el colon irritable o el estreñimiento. Al moverse la columna en torsión se activa el sistema circulatorio, además del energético, que hace te sientas con más vitalidad. Ejemplo de asana: Matsyendrasana.
  • Invertidas: En las asanas invertidas, como su nombre indica, se invierte todo el riego sanguíneo, esto hace que se libere a las piernas de la presión, mejoran el retorno venoso y se evitan las varices. Aumenta el riego a nuestro cerebro lo que contribuye a que mejore nuestra memoria, atención y concentración.  Se masajea la glándula tiroides regulando su funcionamiento.  La columna dorsal y sobretodo cervical se fortalecen.  Toda la zona superior se fortalece, hombros, brazos y antebrazos. Al estar invertido, aumenta la presión arterial, esto has de tenerlo en cuenta si tienes la tensión alta, pero si ya eres un yogui o yoguini de mucha práctica puedes realizarlas sin temor. Ejemplo de asana: Sarvangasana.
  • Equilibrio y de pie:No todas las posturas en bipedestación son de equilibrio pero lo que ambas comparten es que trabajan con el tren inferior, se fortalecen músculos y articulaciones de caderas y piernas, las arterias de las piernas se estiran previniendo la trombosis.  Personalmente me gustan las asanas de equilibrio, que aunque tenga un componente físico para encontrar el equilibrio de la misma, se ha de estar con la mente muy concentrada para no caer. Es por ello que se asocian al equilibrio mente-cuerpo. Ejemplo de asana: Vrikshasana.
Iremos viendo detenidamente algunas de las asanas clásicas, si tienes interés en conocer alguna en particular no dudes en pedírmela.
Me gustaría terminar con uno de los  Yoga Sutras de Patañjali “La perfección en una asana se logra cuando se realiza sin esfuerzo y se alcanza el ser infinito existente en nuestro interior”

¿Cuáles son tus asanas favoritas? Déjanos un comentario y cuéntanoslo! Y si te ha gustado el post también puedes compartirlo desde la barra de iconos inferior.

5 comentarios en “Beneficios del Yoga en nuestro cuerpo físico”

  1. Mis preferidas son los guerreros (Virabhadrasana I, II, III…) pero entre ellas me quedo con el guerrero humilde (the humbled warrior). Aparte de abrir las caderas, el pecho y los hombros pone en su sitio a tu ego.Me encanta acabar la serie con la cabeza mirando al corazón. No importa lo fuerte que seas siempre llega un momento en que debes rendirte…a tí mismo.

  2. En mi caso, mis Ásanas favoritas son las posturas invertidas y las flexiones hacia adelante. Ahora, creo que una pregunta clave también sería: ¿cuáles son las que menos te gustan? Allí podríamos observar que terminamos practicando más las que se nos facilitan y escapamos a los retos. Mis posturas MENOS preferidas son los equilibrios en manos.

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